En este artículo te voy a mostrar todo lo que debes saber para que puedas tocar la batería con metrónomo, fácilmente. Gracias a lo que vas a ver aquí conseguirás dar un salto muy importante de nivel, que te ayudará a seguir creciendo como baterista.
Hola qué tal, soy Dany Alva y te doy la bienvenida a mi blog donde todas las semanas estoy subiendo publicaciones con el objetivo número uno de ayudarte a progresar más rápido con la batería, para que alcances tus metas lo antes posible. Antes de nada te animo a que te registres para recibir mi entrenamiento gratuito aquí y a hacer algún comentario.
La habilidad más importante que debes desarrollar como baterista es tu control del tempo musical. Por eso, te voy a explicar los dos componentes más importantes del tempo, para entender cómo funciona.
Por un lado, tenemos la parte objetiva, es decir, a partir de un instrumento de medida, en este caso el metrónomo, podemos realizar mediciones exactas de la velocidad de una canción Esa medida nos indica la cantidad de pulsos que entran en un minuto o dicho de otra forma los famosos BPM’s. A mayor número de pulsos por minuto, la velocidad será más rápida y, por tanto, a menor número, la velocidad será más lenta. La característica principal de la pulsación es que, como norma general, es constante, por lo que la distancia entre pulsos es igual, lo que hace que se convierta la referencia de tiempo más adecuada para establecer la velocidad de la música.
Por otro lado tenemos el componente subjetivo que está relacionado con cómo cada persona siente esa velocidad y cuál es su tendencia natural. Esta parte subjetiva es la que nos demuestra que nuestro tempo musical debe ser relativamente flexible, al contrario de lo que la mayoría pueda pensar. Además, ese punto subjetivo se usa como una herramienta creativa para jugar con el ritmo con el objetivo de transmitir diferentes sensaciones.
Teniendo en cuenta todo esto, podemos afirmar que no hay una única forma correcta de tocar en el tempo. Básicamente, tenemos tres maneras de interpretar el tempo musical. En primer lugar, la de tocar lo más ajustado posible al clic del metrónomo, mostrando la faceta más estricta de la medida y con la que intentamos acercarnos lo máximo posible a la perfección. En segundo lugar, tocar un poco por detrás del metrónomo, con lo que conseguimos un efecto de relajación y en tercer lugar, tocar un poco por delante del click, provocando la sensación de aceleración.
Entonces debemos de tomarnos el metrónomo como una guía que nos ayuda a mantener la velocidad pero estableciendo un margen de error, con sus límites correspondientes, en el que podemos movernos al tocar sin considerarse que estamos fuera de tiempo.
Hay un ejemplo que yo siempre uso con mis alumnos para que entiendan este concepto, les digo que imaginen un mar en calma y que ellos van en una barca y sienten como el mar hace pequeñas oscilaciones, y la barca se mece suavemente por la superficie. Esa sensación es la forma de entender cómo debemos sentir el tempo musical.
